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Romance y glamour son las palabras perfectas para describir el estilo de Óscar de la Renta. Su evolución fue innovadora, sus prendas sofisticadas y su esencia ahora es inmortal.

¿Qué podemos aprender del legado de éste magnífico diseñador dominicano? Definitivamente, para nosotros es una fuente de inspiración. Detrás de la elegancia y glamour que distinguían al diseñador, había un hombre noble y sencillo. Al paso de los años, el diseñador nos deja con aprendizajes sobre la moda, pasando por el ámbito humano y empresarial.

Desde muy joven soñaba con ser pintor, el arte formaba parte de su esencia, y para mantenerse vendía dibujos de vestidos.

“No importa empezar de cero, lo importante es empezar”

El diseñador Cristóbal Balenciaga lo contrató después de descubrir su talento, convirtiéndose así en su mentor.

“Aprende de los grandes”

El couturier tenía un gran corazón. En su natal Dominicana fundó un orfanato, y en 1984, poco después de enviudar, adoptó a un pequeño que fue encontrado en un basurero, unas horas después de nacido.

“Ayuda a los menos afortunados”

Sus diseños proponían brocados, volumen, colores. Óscar nunca tuvo miedo de innovar y de presentar su esencia, de atreverse, de marcar tendencia. Desde sus capas a cuadros, pasando por las flores, vestidos flamencos, hasta las líneas simples, de la Renta estaba, en definitiva siempre a la vanguardia.

“¡Atrévete, arriesga, crea, sé impredecible!”

Al diseñar, siempre tenía una clienta en mente. Esto le valió un lugar privilegiado entre las socialités, ya que eran su target principal. Las mujeres a las que vestía de la Renta, eran las “ladies who lunch”, una tendencia adoptada entre las mujeres de la alta sociedad.

“Segmenta tu mercado”

Desde los sesenta, vistiendo a Beatrice Lodge, pasando por el 2000, junto a su amiga Sarah Jessica Parker, hasta hace unas semanas, en 2014 diseñando el que sería su último vestido de novia para Amal Clooney, siempre estuvo vigente. Vistiendo a las primeras damas y a las mas altas figuras de la alfombra roja, Óscar sabía qué hacer para estar presente y lo hacía de una manera simplemente fascinante.

“Reinvéntate”

De la Renta vivió su vida, fiel a los principios que lo caracterizaban. Sin duda un ejemplo a seguir, tanto para los diseñadores, empresarios y en general, cualquiera que desee superarse.

¡Gracias Óscar!